A lo largo de nuestras vidas, no ha habido nada más que caos constante, crisis, muerte y sufrimiento en la frontera entre Estados Unidos y México. Existe una razón sencilla para este fenómeno: el sistema de inmigración estadounidense se basa en el principio socialista de la planificación central, lo cual produce un “caos planificado”. Para enfrentar este caos, los funcionarios estadounidenses han impuesto un estado policial migratorio en las zonas fronterizas, el cual ha destruido la libertad y la privacidad y que ahora se está expandiendo a nivel nacional.

Como detalla Jacob Hornberger en esta introducción, hay una —y solo una— solución a este embrollo fronterizo. Esa solución son las “fronteras abiertas”, auténticas fronteras abiertas, es decir, la disolución de la Patrulla Fronteriza, ICE y todas las restricciones al libre movimiento de bienes, servicios y personas a través de nuestras fronteras internacionales. Este libro muestra que no solo las fronteras abiertas son la única solución a la crisis, el caos, el sufrimiento, la muerte y el estado policial migratorio que perduran y nunca terminan en la frontera, sino que además constituyen la única solución que es coherente con los principios religiosos, de libre mercado y morales.