Resultados Editorial "Audible Studios" en Urbana

Desde el Bagdad y la Casita Blanca hasta el Fetish Café y la Órbita de IO, Adaia bucea en las sexualidades menos convencionales de su ciudad y los lugares que las albergan. Barcelona ha sido mi lugar desde hace más de dos décadas. La ciudad donde me he desmadrado de joven, me he hecho adulta, me he desarrollado como periodista y he creado mi propia familia. Quiero saber cómo es la vida sexual de mi ciudad, la que no cabe en titulares clicbait. Aquí viven casi dos millones de personas, es imposible captar su esencia en una frívola estadística.

La relación entre la comida y las ciudades es fundamental para nuestra vida cotidiana. La comida da forma a las ciudades y, a través de ellas, nos moldea, junto con el campo, que nos alimenta. Podría decirse que alimentar ciudades tiene un mayor impacto social y físico sobre nosotros y nuestro planeta que cualquier otra cosa que hagamos. Pero pocos de nosotros en Occidente somos conscientes del proceso. La comida aparece como por arte de magia y rara vez nos detenemos a preguntarnos cómo podría haber llegado allí.

La población urbana se duplicará en cuarenta años, algo que obliga a la transformación holística y sostenible del modelo de ciudad. Para Martha Thorne, decana de IE School of Architecture and Design y directora ejecutiva del Pritzker Architecture Prize, el gran reto de la arquitectura está en su capacidad para hacer metrópolis, que serán más densas y poseerán una alta calidad urbana y una mayor calidad de vida para los residentes.

Cincuenta años después de su publicación, Muerte y vida de las grandes ciudades es, según el New York Times, «probablemente la obra más influyente en la historia de la planificación urbana». Jane Jacobs, columnista y crítica de arquitectura en Nueva York de principios de los años sesenta, afirmaba que la diversidad y la vitalidad de las ciudades estaban siendo destruidas por algunos arquitectos y urbanistas muy influyentes.