Resultados narrador por "Fran de la Torre" en Todas las categorias

¿Votamos por lealtad a un partido o decidimos qué políticas nos convienen más? ¿La política es cada vez más tribal o siempre ha sido así? ¿Nos decantamos por el candidato que más nos gusta o votamos en contra del que detestamos?

Ali es doña manías: el pañuelo de pensar, los desayunos hiperproteicos, la obsesión por la limpieza y el running al amanecer. Debajo de su excéntrico comportamiento y su cuerpo de supermodelo, solo hay una chica que busca desesperadamente ordenar sus sentimientos. No es feliz (todavía). Konrad es don desastre: sin horarios, sin régimen y sin freno... ni en el amor, ni en la comida, ni en el derroche. ¡Gracias al cielo, nació con una creatividad exacerbada que le permite vivir bien y no privarse de nada! Cree que es feliz, hasta que conoce a Ali.

Una trepidante novela de ciencia ficción que nos traslada a Janowitz, una ciudad dónde están pasando cosas extrañas: el cielo cambia de color, el tiempo está descontrolado y una plaga de ceguera se ha extendido entre la población. Y en medio de este caos, un grupo de disidentes pretende derrocar el gobierno.

En esta historia, la tercera en la saga de Amadeo Bola, nuestro entrañable detective se adentrará en los entresijos del mundillo del hip-hop, ya que le han encargado investigar la desaparición del loro de una famosa banda de rap. Los posibles sospechosos son unos cuantos: el manager, el productor de la banda, la secretaria, una fan que está un poco loca... ¿Y tú, quién dirías que es el secuestrador?

Amadeo Bola debe investigar el robo de un sello, pequeño de tamaño, pero aparentemente de gran valor, al que han llamado "ocre mate sin dentar de dos peniques con error en base y sesgo verde". Como os podréis imaginar, un sello de tal nombre esconde detrás de él un gran valor. El propietario es, por supuesto, un millonario ricachón. Menos mal que Amadeo se mueve con soltura en estos ambientes tan refinados. 

Amadeo Bola recibe el encargo de investigar la misteriosa desaparición de un pequeño cuadro de Goya, del Museo del Rincón. Amadeo recibe el encargo de no sola encontrar el dichoso cuadro, ¡sino también al ladrón! La tarea no es fácil, pues se encuentra con múltiples trabas que se interponen en su camino: su madre empeñada en hacerle comer las berenjenas y encontrarle novia (y Amadeo opina que hay que complacer siempre a los padres, que para eso están los hijos), su jefe que siempre está gritándole.